Como ya ha ocurrido para el suelo y los muros, la construcción de las bóvedas también pasa por una fase de acabado y relleno de las juntas.
Tras haber recortado las piezas para que encajen perfectamente en el espacio donde deberán ser colocadas, preparo la lechada con cemento y agua y la aplico sobre todo el intradós de la bóveda.
Luego, antes que el cemento se seque del todo, voy quitando los excesos con un pagno húmedo.
Tras haber recortado las piezas para que encajen perfectamente en el espacio donde deberán ser colocadas, preparo la lechada con cemento y agua y la aplico sobre todo el intradós de la bóveda.
Luego, antes que el cemento se seque del todo, voy quitando los excesos con un pagno húmedo.
Los últimos retoques los voy dando con el papel de lija. El resultado final sobre la primera bóveda es el que se ve en la foto de abajo.
Las imágenes anteriores se refieren a la bóveda con trampilla enmarcada en piedra, pero el procedimiento es exactamente el mismo.
Las imágenes anteriores se refieren a la bóveda con trampilla enmarcada en piedra, pero el procedimiento es exactamente el mismo.
Mientras, voy subiendo los muros de la cantina siguiendo la curva de las bóvedas (exagero un poco en exceso, pero ya recortaré las curvas con más precisión).
Entre una curva y otra coloco los marcos de piedra que servirán de base para las mismas bóvedas...
Entre una curva y otra coloco los marcos de piedra que servirán de base para las mismas bóvedas...
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