[ESP] Construcción 44: Muros de piedra (1)

Por fin se abre una nueva etapa. Terminados los subterráneos, ha llegado para la Domus la hora de crecer en altura y alcanzar el nivel del suelo.
Como ya dije, a partir de ahora voy a dejar las estructuras de hormigón armado para seguir la construcción de forma más coherente con la época medieval, aunque mantendré el uso de la armadura metálica interna para dar más resistencia al conjunto.

Hace tiempo, cuando aún estaba trabajando en las bóvedas de la cantina, comencé a colocar algunos sillares para que los muros fueran subiendo. Se trataba en realidad de una prueba, ya que no tenía bien claro como iba a seguir. El tramo de muro era el que se encuentra bajo la torre, en la cual se abrirá arriba la puerta de acceso para la escalera que va a la cantina.
Dicha torre deberá diferenciarse del resto del edificio también por el material usado, y como todavía no tenía bien claro con cuáles piedras construirla, había considerado la posibilidad de hacerla con sillares de cemento como los que puse en los subterráneos y que también parecen pertenecer a la base de la torre.
Sin embargo esos bloques resultan demasiado frágiles, y el aspecto del cemento no recuerda mucho las piedras cortadas usadas en la construcción de las torres genovesas sino por el color gris claro.

De todos modos, la prueba no era satisfactoria principalmente por otra razón. La posición de los sillares no era correcta, ya que correspondía a la estructura de hormigón y no a lo que sería el perimetro interno de la torre.
Me explicaré mejor: para seguir la construcción de los muros en toda su profundidad, hay que alinear las piedras con las paredes del sótano, sobreponiendose un poco a las bóvedas (como se ve claramente en la sección a la derecha, tomada de un volumen de Viollet-le-Duc). Lo cual era imposible mientras aún estaba trabajando en el interior de la cantina, así que dejé la operación para cuando las bóvedas estuvieran puestas de forma permanente.
Es decir ahora.

Mientras, encontré también el material adecuado para la construcción de la torre, así que ya no hay impedimento alguno a que la obra siga adelante.

Las primeras piedras colocadas son precisamente las que se encuentran a la base de la torre, seguidas por los sillares de pizarra de los cuales estará hecho todo el resto de la estructura (por lo menos en las partes más bajas del edificio).
El uso de sillares tan escuadrados y bien cortados para trozos de muro que quedarán escondidos a la vista no tendría mucho sentido en un edificio real, ya que el coste resultaría bastante mayor. Probablemente se pondrían unos bloques más irregulares acompañados por una buena cantidad de mortero.
Yo desde ese punto de vista no tengo problemas, siendo la pizarra el material del que tengo más disponibilidad, así que usaré piedra "noble" en toda la estructura.

En mi reproducción la pizarra va a sustituir la que en realidad sería piedra "di promontorio", una piedra caliza que los antiguos genoveses cavaban en las rocas cercanas a la ciudad, y que me resultaría más difícil de encontrar en tiras pequeñas y más dura de cortar con mis herramientas.

Mientras sigo con los muros, hay otras cosas de las cuales tengo que encargarme: la finalización de la escalera (a la cual añado por fin el último escalón de piedra y que alcanza ahora el nivel de la planta baja), y el cierre de la segunda porción de bóvedas con excepción de la que se encuentra junto a la escalera y que de momento queda apartada.

El siguiente paso será terminar el entramado de los muros a lo largo de los ejes portantes del edificio y sobre los cuales apoyarán pilares, columnas, muros y todos los elementos que formarán la estructura de la Domus.

Pero de ésto hablaremos más adelante, mano a mano que la construcción sigue su camino...